Instrumentos de energía creadora

(tomado del libro 13 PASOS HACIA UNA PERSONALIDAD MAS DINAMICA
AUTORES W. Uraneck y C. G. Goeller)


1. EL ENORME AMPLIFICADOR. Éste le ayuda a "pensar en grande".
Muchas buenas ideas han surgido del simple proceso de hacer
algo mayor de lo que era. Ensaye este recurso con el problema
que tiene a la mano. Puede ponerlo en marcha con preguntas
clave como éstas:

¿Deberá ser más alto, más ancho, más pesado? ¿Puedo hacerlo
mayor? Podrá aumentarse su capacidad? ¿Cómo podría contener
más? ¡Cuál sería el resultado de una fórmula mayor?
¿Necesitará mayor espacio? ¿Un embalaje más grande? ¿Por qué
no venderlo ¿ mayor precio? ¿O hacer la prueba con él en mayor
proporción? ¿O aumentar su volumen? ¡O su número? ¿Deberán
usarse más páginas? ¿Será mejor un pincel más grueso, o un
lienzo mayor? ¿Convendrá que sea. más sonoro? ¿Más prolongado?
¿Deberá incluir más gente? ¿Deberá extenderse a más ciudades?
¿A más países?. ¿A otros planetas?

El AMPLIFICADOR ha sido empleado con éxito casi por todas las
industrias, y a esto se debe el que hoy encontremos el "tamaño
familiar" en todas las cosas, desde el jabón hasta los
cigarrillos, desde los automóviles hasta los aviones, desde
los centros comerciales hasta los rascacielos. ¡Por añadidura,
aun en las tarjetas de felicitación!
Es evidente que hay problemas que no pueden resolverse con un
amplificador. Por ejemplo, no se aplicaría esta técnica a la
solución de la deuda nacional ni a una epidemia de influenza.
Por eso hay que pasar al siguiente instrumento.

2. EL REDUCTOR COMPACTO. Si no se trata de "pensar en grande",
enfóquese el problema desde el ángulo opuesto y "piénsese en
pequeño". Es un procedimiento útil para resolver más que
simples problemas de peso. Hay algunas preguntas como las
siguientes que son la clave para este instrumento creador de
lo pequeño:

¡Por qué no empequeñecerlo? ¡Hacer la prueba en miniatura?
¿Simplificarlo? ¿Qué resultado daría la mitad? ¿Se necesita
tanto espacio? ¿No podría hacerse más ligero? ¿Más corto?
¿Procurar que abarque menos extensión? ¿Podría suprimirse una
parte o la mayor parte o todo? ¿Podrían emplearse menos
palabras ¿Bastaría con menos arte? ¿Con menos colores? ¿Podría
ser más suave? ¿Qué resultado daría hacer esto con menor
número? ¿En menos tiempo? ¿Con menos dinero? ¿Con menos gente?
¿En menos proporción?

La prueba de la efectividad de este método de "pensar en
pequeño" ha andado rondando en torno nuestro durante años, en
los automóviles pequeños o deportivos, en las minimotos,
minifaldas, bikinis, radios en miniatura, televisores
portátiles... ~ en fin, la lista es interminable. El uso del
REDUCTOR no debe limitarse a la industria automotriz o
electrónica, ni tampoco al mundo de la moda. Puede dar buen
resultado en problemas de todo género.

Después de aplicarlo, alguien dirá: "Era tan sencillo." Sí,
pero una persona tuvo que pensar en ello. Ahora bien, todos
sabemos que la vida no está hecha simplemente de
amplificaciones y reducciones. Con frecuencia se verá que una
solución requiere enfoques más complicados. Examinemos, pues,
los demás instrumentos de que se dispone.

5. EL PODEROSO MODIFICADOR. Si no se puede convivir con una
cosa tal como es, no hay que abandonarla o destruirla, sino
cambiarla, hacerla diferente. Ninguna cosa ha logrado un
estado tal de perfección que uno que otro cambio no pueda
mejorarla. Estas mejoras pueden ir desde pequeñas reparaciones
hasta un reacondicionamiento total, desde un ligero retoque
hasta un recubrimiento general. Con frecuencia esto
representará mucho más trabajo, pero es muy probable que los
resultados bien valgan el esfuerzo.

Las llaves para poner en marcha el poderoso MODIFICADOR son
preguntas como estas:
¡Carao podría revisarse? ¿Qué sucedería si fuese más suave,
más duro, más flexible o más rígido? ¡Cómo se vería de otro
color? ¿Qué detalles servirían para mejorarlo? ¿Cómo podría
dársele mayor valor? ¿Sería mejor temporal que permanente?
¿Qué resultaría si su duración fuese más corta o más larga?
¡Cómo podría hacerse con otras bases o sobre otro diseño? ¿Qué
resultaría si »e hiciera la prueba con otro sonido o con otra
forma . ¿Si se hiciera más gracioso o más serio? ¿Si se le
cambiara de aspecto? ¡Funcionaría mejor con ruedas, con alas,
con patas o con palabras? ¿Qué resultaría de hacer la prueba
en otro idioma? ¿Valdría la pena revisar la finalidad o el
objetivo?

Por todas partes en torno nuestro hay centenares de ejemplos
de modificaciones que han conducido a productos de más
calidad, estilizados, o bien a un ahorro considerable en los
costos, que puede ir desde detalles en apariencia tan
insignificantes como pintar con un solo color en vez de usar
dos, hasta fenómenos industriales de gran alcance, por
ejemplo, en la explotación de minas o del petróleo.

4. EL ADAPTADOR PORTÁTIL. Los cambios complicados no siempre
son necesarios. De hecho, es posible comprobar que en vez de
esforzarse denodadamente por cambiar algo, bastaría con una
simple adaptación para lograr lo que se desea. Estúdiese el
problema desde todos los ángulos, para ver si se tienen todos
los elementos para resolverlo. De ser esto así, es posible que
se puedan lograr los resultados con algunas adaptaciones.
Puede usted hacer la prueba con algunas de estas preguntas
clave:

¿Qué sucedería si se invierte su posición? ¿O se coloca de
lado? ¿O se pone vertical raen te sobre un borde? ¿O se arma
de otra manera? ¿No podría desplegarse en otra forma? ¿O
llevarse a otra parte? ¿Necesita otro departamento u otra
división? ¿Qué sucedería si el primero ¡e pone al último y
viceversa? ¿Por qué no cambiar de lugar? ¿Cómo funcionaría en
otro sitio? ¿Quién podría hacerlo mejor? ¿Qué otra máquina
podría hacer el trabajo con más efectividad? ¡De qué otro modo
podría distribuirse, ¡Cómo se vería en otra pared? ¿En un
medio diferente? ¿De qué otro modo podría dividirse?

Cualquier ama de casa sabrá decir que un nuevo arreglo es un
medio especialmente efectivo de expresión creadora personal,
lo mismo es que se refiera al mobiliario, que a una lista de
invitados o a un menú.

5. EL REMPLAZADOR SINTÉTICO. Así como los médicos actualmente
deciden hacer un trasplante de corazón o de riñón, una vez que
han agotado todas las demás posibilidades, así la mente
dinámica debe estar dispuesta a levantar un problema y
trasladarlo a otra parte o a sustituirlo por otra cosa y debe
ser también capaz de hacerlo.

El remplazador ha sido efectivo en muchos campos,
especialmente en el de la literatura. Algunas obras únicas de
ficción fueron fruto de una sustitución. Por ejemplo, Mark
Twain sustituyó a un príncipe por un campesino en su obra The
Prínce and the Pauper; H. G. Wells introdujo invasores
marcianos en lugar dé un clásico ejército en su obra The War
of the Worlds; y en la obra popular más reciente Planets of
the Apes ("El planeta de los simios"), el autor tuvo la
audacia de sustituir al hombre por el- simio como criatura
dominante en una futura civilización.

El siguiente caso es un ejemplo interesante del uso científico
de la sustitución:

Uno de los últimos descubrimientos de la ciencia es un
transmisor de radio que funciona a base de "energía de
gérmenes”. Generan la electricidad de este aparato unas
bacterias inocuas que se alimentan de azúcar y viven en tubos
de ensayo, llenos de agua de mar. Los científicos aseguran que
este tipo de energía eléctrica puede llegar a producirse en
cantidad suficiente para iluminar ciudades enteras y que de
modo semejante puede convertirse la energía solar para uso
ordinario, y el agua salada en agua potable.

¿Cómo puede darse principio al REMPLAZADOR sintético; ¡con
preguntas! He aquí algunas con las que puede empezar:

"¡Qué otra cosa podría dar resultado aquí? ¿Otro sonido,
diferente tamaño, diverso horario? ¡Algo serio en vez de algo
jocoso o viceversa? ¿Miel en vez de vinagre? ¿Venta moderada
en lugar de venta intensa? ¿Un líquido en ve/ de un sólido?
¿Un enfoque liberal o un enfoque conservador? ¿Una máquina en
lugar de trabajo? ¿Caliente en vez de frío? ¿La misma idea en
otro contexto? ¿Alguna otra fuente de energía? ¿Hechos en vez
de conjeturas? ¿Diferente tiempo, lugar o personas? ¿Viejo en
vez de nuevo? ¿Dirección y no presión.?

6. EL INVERSOR REPENTINO. ¡Invierta el orden de sus
pensamientos! Viaje en dirección opuesta un tiempo y se
encontrará con muchas más combinaciones de ideas y diversas
posibilidades. ¿Cuántas veces se ha dado cuenta de que está
aceptando un procedimiento vigente o una "verdad" por el solo
hecho de que "así se ha hecho siempre"? Trate de invertir el
procedimiento. Se sorprenderá de los buenos resultados.

Una vieja costumbre china prescribía pagar al doctor una cuota
regular mientras el paciente gozara de buena salud. El pago se
detenía en el momento en que se presentaba una enfermedad y no
se reanudaba sino cuando el paciente se había recuperado
completamente. ¿No es esto hacer las cosas a¡ revés? Quizá sí
pero el sistema favorecía la atención continua a la buena
salud del paciente.

Formule estas preguntas para poner en movimiento su INVERSOR:

¿Que sucedería sí lo colocara al revés? ¡Si ensayara lo
insospechado? ¿Si mirara en dirección opuesta? ¿Debo detenerme
o proseguir? ¿Trasponer, permutar o retroceder? ¿Ir despacio
en lugar de marchar aprisa o viceversa? ¿Callarme en lugar de
hablar? ¿Es este el tiempo o el lugar para una psicología de
inversión?

7. LA COMBINACIÓN CORRECTA. Aunque todas las ideas son
combinaciones de otras ideas o experiencias, algunas de estas
operaciones se producen en forma subconsciente. Pero la
combinación consciente puede dar por resultado ideas
interesantes. Haga ¡a prueba. Pregúntese:

¿Qué sucedería si lo combino con otra cosa? ¡Pueden unirse,
casarse o ponerse juntos? ¿Puede compaginarse lo discrepante?
¿O combinarse lo opuesto?¿Podría experimentarse con
colecciones de palabras, colores, aumentos, condimentos o
vestidos nuevos? ¿Qué resultaría de combinar humorismo con
tragedia? ¿O de asociar diversos sentidos: el gusto con la
vista, el oído con el tacto, la vista con el olfato? ¿Qué
efecto tendría combinar lo sano con lo enfermo, lo fuerte con
lo débil, lo viejo con lo joven? ¿Cómo se verían las palabras
combinadas con imágenes, tas leyendas con los hechos?

El mundo en que vivimos está lleno de combinaciones exitosas,
que van desde las pasas en el desayuno y la menta en los
cigarrillos, hasta el amoniaco en los detergentes, llaves de
retención en los tanques de gas y fluoruro en las pastas de
dientes.

8. EL ADAPTADOR UNIVERSAL. No es posible que usted tenga todas
las buenas ideas; por lo mismo, no dude en tomarlas de los
demás, pedirlas o recogerlas. Observe lo que sucede en torno
suyo lo que se ha hecho en el pasado y sírvase de estas
preguntas para poner en movimiento su ADAPTADOR:

¿Qué puedo imitar? ¿Adaptar? ¿Fecundar entrecruzado? ¿Qué
enfoque atinado de otro campo del saber (de una organización.
de la filosofía) daría resultado en este caso? ¡Qué
investigaciones recientes podrían servirme? ¿Qué hacen los
demás en situaciones como éstas? ¡Qué han hecho mis vecinos?
¿Dónde más puede aplicarse esta idea? ¡A qué se parece? ¿Tiene
otros orígenes? ¿Para qué más puede serme útil?

¡No deje tranquila una idea hasta haberla explotado en todo su
valor! Si sirve en un lugar, hay posibilidades de que también
sirva en otro, ¡o en muchos otros! Si la idea fue suya, tanto
mejor, pero si es de otra persona que ha agotado sus
posibilidades, no tema usarla como punto de partida para sus
ideas personales. Así es como se realiza el progreso.

9. EL RESURIIECTOR DE IDEAS. No tema escarbar en el pasado en
busca de ideas y resucitar las que se han desechado o las que
no han tenido éxito. Una buena idea no muere nunca, aunque se
la considere así. ¡Es una lamentable pérdida! Muchas ideas
simplemente necesitan esperar el tiempo oportuno; ahora bien,
cuando éste llegue, no vacile en ponerla nuevamente a prueba.
He aquí un ejemplo a propósito:

A fines de la década de 1320, un corredor de bienes inmuebles
visitó a varios propagandistas de juegos con la intención de
venderles un juego familiar de su invención. En vano. Regresó
a su mesa de trabajo y lo revisó cuidadosamente. Pasó el
tiempo y llegaron los primeros años treinta. Precisamente una
de las compañías que lo había rechazado inicialmente, volvió a
considerar la proposición y lo compró. El juego parecía a
propósito para la ¿poca de !a depresión y resultó un éxito en
el momento y, posteriormente, una leyenda en el mercado.
Aproximadamente en 40 años, a partir de entonces, ha invadido
materialmente el mundo con su popularidad y se ha traducido a
unos 60 idiomas. Parte del material del juego son billetes y
el editor de ellos imprime más que la casa de moneda de los
Estados Unidos. ¿De qué luego estamos tratando? Del que en
español se llamó "El turista", y que su creador bautizó
originalmente como "Monopoly".

10. EL BUSCADOR SISTEMÁTICO. No debe haber fronteras en su
búsqueda inicial de ideas. Nada debe considerarse demasiado
remoto, alto, costoso, etcétera, durante el proceso inicial
del pensamiento. Si aquí no encuentra la idea que necesita,
búsqueda en otra parte. Siga buscando y utilice estas
preguntas como guía de su investigación:

¿Por qué no buscar en otra parte? ¿Qué sucedería sí cavara más
a fondo o llegara más arriba? ¿A quién más puedo preguntar?
¡Donde puedo hallar más información? ¿Debo preguntar de nuevo?
¿Donde más daría resultado? ¡Por qué no puede hacerse aquí?
¿Qué sucedería si...?

Para una persona dinámica, la vieja expresión "... que venga
la gloria a mi", no está tan traída de los cabellos. En este
mundo en que vivimos, que se encoge continuamente, la
distancia y la dificultad ya no son un obstáculo formidable.

Estos son, pues, sus diez fundamentales "instrumentos de
energía" para el desarrollo de sus ¡deas. Quizá pueda realizar
algunos trabajos con uno, tal vez necesite dos o tres. En
problemas especialmente arduos, es posible que necesite los
diez antes de dar con la idea.
Observe cómo cada uno de estos instrumentos utiliza preguntas,
que son sus llaves de "encendido". La facultad creadora medra
a base de desafiar a la situación creada, empezando
generalmente con preguntas de este tipo: "¿Qué sucedería
si...?", o también: "¡Por qué no tratamos de...?"

Las preguntas que hemos formulado aquí son simples puntos de
partida. Las que usted proponga deben adaptarse al problema de
que se trata. Una advertencia: evite preguntas que pueden
responderse fácilmente con un simple si o no. Procure hacerlas
de suerte que exijan tiempo y reflexión para llegar a la
respuesta. Siempre es fácil y tentadora la posibilidad de
esgrimir el clásico no destructor de ideas. El fin de estos
instrumentos es ayudarle a elaborar tantas ¡deas como sea
posible en el menor tiempo, y una vez que aprenda a usarlos
sentirá satisfacción de ver cuan útiles pueden ser.